jueves, 12 de febrero de 2015
Going out
Yo lloro poco
y si lloro,
lloro mal.
No se como se llora.
No se llorar cuándo hay que llorar.
A veces creo que si llorara,
lloraría palabras
o cristales,
o ruido.
Hay momentos en los que tengo unas ganas tremendas de salir corriendo,
sentarme en algún lugar , y sin ningún motivo, ponerme a llorar.
Y caminar por la ciudad sin dejar de llorar y entrar en tiendas sin dejar de llorar, y mirar a la gente sin dejar de llorar, y hablar y besar y follar sin dejar de llorar.
Y lloraría por el vuelo de una mosca en algún lugar.
Y lloraría por el viento que mueve la hierva.
Y lloraría por las cosas que empiezan y por las cosas que acaban.
Y volvería a llorar.
Y me parecía lo más bonito que haya hecho nunca.
.
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